Casi 800.000 ciudadanos rumanos y búlgaros residentes en España podrán trabajar a partir de mañana sin ningún tipo de trabas administrativas y en igualdad de condiciones al resto de europeos y nacionales. El 1 de enero concluye la moratoria de dos años que el Gobierno español impuso a los ciudadanos de estos dos países que, a pesar de entrar en la Unión Europea en 2007, tenían vetada la libre circulación para trabajar por cuenta ajena.
El Consejo de Ministros del pasado 19 de diciembre decidió no ampliar más esta moratoria (que podía extenderla hasta 2014), ya que, según explicó la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, el Ejecutivo espera que, habida cuenta del crecimiento económico de ambos países, buena parte del número de inmigrantes regresen voluntariamente a Rumanía y Bulgaria. Ambos Gobiernos, además, han puesto en marcha sendas campañas para incentivar la vuelta a casa de sus nacionales. No obstante, el Ejecutivo español se reserva la posibilidad de revisar su decisión de levantar las trabas a estos trabajadores.
Dentro de seis meses analizará la situación para evaluar si el fin de las barreras a estos ciudadanos ha tenido efectos negativos, si bien hace unos días el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, se mostró convencido de que no será así.
El número de trabajadores exactos que se acogerán a la posibilidad de trabajar en España es desconocido. Sólo se puede estimar el número de potenciales beneficiarios. El Instituto Nacional de Estadística cifra en 651.311 los rumanos residentes en España mayores de edad, y en 135.775 los búlgaros con más de 18 años. La comunidad rumana creció de octubre de 2007 a octubre de 2008 casi un 42%, mientras que la colonia búlgara aumentó un 25% en idéntico período.
Empadronamientos
Por otro lado, el año 2008 arrancó con 691.920 inmigrantes empadronados en España que no constaban como titulares de una tarjeta de residencia, unos 30.000 menos que el año anterior, tal y como se desprende del cruce entre los datos del padrón a 1 de enero de 2008, y las cifras de residentes legales del Ministerio de Trabajo e Inmigración, a 31 de diciembre de 2007. La comparativa da una estimación del número de extranjeros extracomunitarios que pueden encontrarse en el país en situación irregular.
El Gobierno comenzó el pasado año a depurar estas cifras asegurando que para conseguir una estimación certera, al resultado de la comparación entre ambas estadísticas oficiales hay que restar una serie variables: tarjetas de residencia en proceso de renovación (260.000, según el Gobierno), renovaciones padronales no actualizadas (en el padrón de 2.008 han sido unas 20.000) estudiantes (en torno a 40.000), solicitantes y asilados (5.000), trabajadores temporales (25.000 en 2007) y transfronterizos. Haciendo este ajuste, la bolsa de 'sin papeles' se situaría por debajo de las 300.000 personas. Un año antes, con los mismos cálculos, la cantidad estimada rondaba los 350.000.
Entre los colectivos de extranjeros más numerosos en España, los desajustes más significativos los protagonizan algunos ciudadanos latinoamericanos, como los bolivianos (170.942 no figuran con tarjeta de residencia), los paraguayos (53.059), argentinos (49.260) colombianos (26.404) y ecuatorianos (24.302).
Fuente: "Las Provincias de Castellón"
El Consejo de Ministros del pasado 19 de diciembre decidió no ampliar más esta moratoria (que podía extenderla hasta 2014), ya que, según explicó la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, el Ejecutivo espera que, habida cuenta del crecimiento económico de ambos países, buena parte del número de inmigrantes regresen voluntariamente a Rumanía y Bulgaria. Ambos Gobiernos, además, han puesto en marcha sendas campañas para incentivar la vuelta a casa de sus nacionales. No obstante, el Ejecutivo español se reserva la posibilidad de revisar su decisión de levantar las trabas a estos trabajadores.
Dentro de seis meses analizará la situación para evaluar si el fin de las barreras a estos ciudadanos ha tenido efectos negativos, si bien hace unos días el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, se mostró convencido de que no será así.
El número de trabajadores exactos que se acogerán a la posibilidad de trabajar en España es desconocido. Sólo se puede estimar el número de potenciales beneficiarios. El Instituto Nacional de Estadística cifra en 651.311 los rumanos residentes en España mayores de edad, y en 135.775 los búlgaros con más de 18 años. La comunidad rumana creció de octubre de 2007 a octubre de 2008 casi un 42%, mientras que la colonia búlgara aumentó un 25% en idéntico período.
Empadronamientos
Por otro lado, el año 2008 arrancó con 691.920 inmigrantes empadronados en España que no constaban como titulares de una tarjeta de residencia, unos 30.000 menos que el año anterior, tal y como se desprende del cruce entre los datos del padrón a 1 de enero de 2008, y las cifras de residentes legales del Ministerio de Trabajo e Inmigración, a 31 de diciembre de 2007. La comparativa da una estimación del número de extranjeros extracomunitarios que pueden encontrarse en el país en situación irregular.
El Gobierno comenzó el pasado año a depurar estas cifras asegurando que para conseguir una estimación certera, al resultado de la comparación entre ambas estadísticas oficiales hay que restar una serie variables: tarjetas de residencia en proceso de renovación (260.000, según el Gobierno), renovaciones padronales no actualizadas (en el padrón de 2.008 han sido unas 20.000) estudiantes (en torno a 40.000), solicitantes y asilados (5.000), trabajadores temporales (25.000 en 2007) y transfronterizos. Haciendo este ajuste, la bolsa de 'sin papeles' se situaría por debajo de las 300.000 personas. Un año antes, con los mismos cálculos, la cantidad estimada rondaba los 350.000.
Entre los colectivos de extranjeros más numerosos en España, los desajustes más significativos los protagonizan algunos ciudadanos latinoamericanos, como los bolivianos (170.942 no figuran con tarjeta de residencia), los paraguayos (53.059), argentinos (49.260) colombianos (26.404) y ecuatorianos (24.302).
Fuente: "Las Provincias de Castellón"
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